La verdadera realidad la encontraréis bajo estas lineas

jueves, 24 de febrero de 2011

"Por tí, por mí, por nosotros"

Alzó la vista y no fue capaz de ver nada más que aquel inmenso cartel en medio de la autopista. Era un cartel oscuro casi negro con unas letras blancas y ovaladas que rezaban: "Por tí, por mí, por nosotros". Se detuvo y lo observó muy detenidamente mientras repetía una vez tras otra ese estúpido eslogan: "Por tí, por mí, por nosotros". Parecía un antiguo disco de vinilo en el que la aguja llegaba al final, chocaba contra el papel donde ponía el artista y el nombre del LP y saltaba hacia el final de la última canción repitiendo siempre lo mismo. Le parecía una payasada pero, en realidad, no podía parar de decirlo. El "Por tí, por mí, por nosotros" bullía en su cabeza como un incesante vaivén en una fiesta abarrotada de gente. Quien quiera que fuera el que haya inventado la campaña de marketing ha estado acertado, ha conseguido su objetivo, pensó en su fuero interno. Reanudó la marcha y esa machacona y repetitiva cantinela lo perseguía por la A-8 camino de casa. El trastorno obsesivo compulsivo que poseía estaba de nuevo haciendo de las suyas. "Por tí, por mí, por nosotros" repetía una y otra vez mientas se metía dos pastillas en la boca para intentar controlar las compulsiones. No se había dado cuenta de que era época de elecciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario